La vitamina C o ácido ascórbico, es una de las vitaminas solubles en agua. Esta se encuentra mayormente en frutas y verduras. Se encuentra involucrada en la formación de colágeno, carnitina y en la regulación de los genes. También es conocida por su gran potencial antioxidante. Los seres humanos no tienen la capacidad de producir dicha vitamina por lo que es indispensable que sea obtenida a través de la alimentación. Sin embargo, la deficiencia de esta vitamina es poco frecuente en personas sanas que llevan una dieta saludable. Durante el embarazo el requerimiento de esta vitamina incrementa a medida que la vitamina C es transportada al bebé, ocasionando que su concentración en el plasma materno vaya disminuyendo.
Se ha encontrado que una disminución en la ingesta de vitamina C podría asociarse con diferentes complicaciones durante el embarazo como hipertensión con edema en manos, pies y cara, anemia y un recién nacido pequeño.
La suplementación con antioxidantes se ha relacionado con una reducción en el riesgo de desprendimiento de la placenta y parto prematuro en las mujeres fumadoras durante el embarazo, pero no en las no-fumadoras. Otro estudio encontró una mejoría en la función pulmonar durante la primera semana de vida y un menor riesgo de sibilancia durante el primer año de edad en bebés cuyas madres fumadoras se suplementaron con vitamina C. También se ha visto que dicha suplementación durante el embarazo con vitamina C podría reducir el riesgo de presentar un desprendimiento placentario.
Durante el embarazo es muy común que las madres lleguen a presentar anemia como consecuencia de déficit de hierro. La presencia de anemia se relaciona con la aparición de efectos adversos como nacimiento prematuro, bajo peso al nacer, muerte fetal y materna durante el embarazo o parto, afecciones del recién nacido, y disminuye la resistencia a las infecciones. También puede agravar los efectos de la hemorragia durante el parto. El hierro se encuentra en los alimentos de origen animal como en la carne. Para que el cuerpo pueda absorber mejor el hierro proveniente de los alimentos vegetales y de los suplementos, es importante combinarlo con alimentos ricos en vitamina C como pimientos, kiwi o tomate. Recuerda que la absorción de hierro se ve perjudicada cuando al consumirlos, lo combinas con alimentos ricos en calcio.
La toxicidad por plomo se ha visto incrementada en mujeres embarazadas, la cual genera alteraciones en el crecimiento y desarrollo del bebé. Diversos estudios han relacionado las concentraciones más bajas de vitamina C con mayores concentraciones de plomo en sangre. Por lo tanto, la suplementación de vitamina C durante el embarazo podría disminuir las concentraciones de plomo en sangre. Se cree que la vitamina C interviene en la absorción a nivel intestinal del plomo o bien incrementa su excreción urinaria.
El embarazo es una de las etapas en las que se presenta una mayor demanda a nivel nutricional. En esta etapa es indispensable mantener una ingesta adecuada de nutrimentos como calcio, hierro, folatos, vitamina C, etc. La vitamina C es una de las vitaminas más importantes en la alimentación. Se encuentra principalmente en frutas y verduras, por lo que un déficit de esta vitamina resulta ser muy rara. Sin embargo, en el embarazo se puede llegar a tener una deficiencia de vitamina C si los requerimientos no son cubiertos adecuadamente. Uno de los problemas que se presentan comúnmente es la anemia por deficiencia de hierro, vinculada con múltiples problemas durante el embarazo. La ingesta de vitamina C, ayuda a mejorar la absorción de hierro y con ello evitar la aparición de la anemia.
Equipo de investigación y editorial iNat México.
Referencias
Michels, A. J. (2018, 1 enero). Vitamina C. Linus Pauling Institute.
Rumbold, A., Ota, E., Nagata, C., Shahrook, S., & Crowther, C. A. (2015). Vitamin C supplementation in pregnancy. Cochrane Database of Systematic Reviews, suppl.9.
Anemia por deficiencia de hierro durante el embarazo: consejos de prevención. (2019, 25 octubre). Mayo Clinic.
Cardero Reyes, Yusimy, Sarmiento González, Rodolfo, & Selva Capdesuñer, Ana. (2009). Importancia del consumo de hierro y vitamina C para la prevención de anemia ferropénica. MEDISAN, 13(6)
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