Un estudio reciente sugirió que hay una tendencia hacia la disminución de la fertilidad por el alto consumo de alcohol (más de 2 tragos diariamente).
Más allá de problemas de fertilidad, la ingesta de alcohol ha estado vinculada a peores resultados en numerosas condiciones, como se describen a continuación.
El consumo diario de alcohol, puede incrementar el riesgo de los siguientes cánceres:
1- Colorrectal.
De 10 a 20% con el consumo usual de 50g diarios.
2- Cáncer de seno.
Por cada ⅔ de un trago (vasos) consumido diariamente (10 g de alcohol), el riesgo aumenta de un 7 a un 10%.
3- Cáncer de la cavidad oral, faringe y laringe.
Menos de 2 tragos (vasos) diarios equivalen a un 86 % de incremento del riesgo. Tres a cuatro tragos diarios equivalen a un 311% de incremento del riesgo.
4- Cáncer esofágico.
Menos del tres tragos, equivalen a un 39% de incremento de riesgo. De tres a cuatro tragos diarios equivalen a un 93% de incremento del riesgo.
5- Cáncer de hígado.
Menos de dos tragos diarios equivalen a un 19% de incremento del riesgo. Tres a cuatro tragos diarios aumentan a un 40% el riesgo.
6- Alta presión sanguínea.
Sólo dos tragos al día están asociados a un incremento del riesgo en un 25% en hombres.
7- Problemas del ritmo cardíaco.
Más de dos tragos al día aumenta cerca del 15% de problemas conductores.
8- Pancreatitis.
El alto consumo de alcohol incrementa considerablemente el riesgo de cirrosis y falla hepática.
9- Cirrosis hepática.
El riesgo de cirrosis y falla hepática se potencializa increíblemente, siendo casi segura su aparición en un periodo de tiempo relativamente corto.
10- Insomnio.
Del 35 al 70% de las personas que beben alcohol de manera continua, padecen insomnio: esto es una tasa mucho más alta que la de la población general.
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