La dieta cetogénica es una de las dietas que ha tomado gran popularidad en los últimos años debido a sus múltiples beneficios para la salud. En este tipo de dieta el consumo de hidratos de carbono se restringe, las proteínas se moderan y se aumentan las grasas. Todo esto con el propósito de que el metabolismo de la glucosa se cambie como fuente principal de energía, utilizando los cuerpos cetónicos obtenidos del metabolismo de las grasas, es decir, se utiliza la grasa como principal suministro de energía. Esta dieta ha demostrado ayudar en la reducción de peso corporal, revertir los signos del síndrome metabólico, reducir y eliminar los requisitos de insulina en personas con diabetes tipo II, reducir la inflamación, complementar tratamientos contra el cáncer, aumentar la longevidad, incrementar la función cerebral.
A pesar de tener tantos beneficios para la salud, la dieta cetogénica puede resultar perjudicial para la salud de los huesos. Se ha encontrado que una dieta alta en proteínas podría tener un efecto negativo en el metabolismo del calcio y por consiguiente en la densidad ósea. En un estudio realizado en atletas que se sometieron a una dieta cetogénica durante 3,5 semanas, mostraron un cambio en la densidad ósea de los atletas. Este cambio podría ser debido a un efecto en el proceso metabólico donde la disminución del consumo de hidratos de carbono promueve un menor índice de hormonas. Asimismo, este régimen de alimentación se asoció con mayores índice de fatiga, deshidratación y el llamado “resfriado Keto”.
Hoy en día este tipo de dieta ha aumentado en popularidad debido a que es empleada como uno de los métodos para la reducción de peso corporal, equilibrar las concentraciones de glucosa en sangre o bien mejorar su salud de alguna otra manera. Existen deportistas que recurren a este régimen con la finalidad de optimizar su desempeño, ya que la grasa, como fuente de energía tiene una mayor duración y su consumo es prolongado.
Sin embargo, hay estudios que sugieren que una dieta reducida en hidratos de carbono y alta en grasas podrían tener la capacidad de modificar el metabolismo óseo. En un estudio se evaluó la densidad mineral ósea de niños que llevan una dieta cetogénica como parte de su tratamiento contra la epilepsia. Se encontró que los niños con este régimen de alimentación presentaban una densidad mineral ósea baja, la cual podría continuar disminuyendo con este tipo de dieta, por ello se recomienda llevar un control para prevenir un desmineralización mayor.
Aunque la dieta cetogénica es eficaz para el tratamiento de diversas patologías, se ha visto que podría ser perjudicial para la salud ósea, por ello se recomienda emplearla de manera cuidadosa para evitar afectar la salud de los huesos
Equipo de investigación y editorial iNat México.
Referencias
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